Los créditos personales Vivus podría parecer que no mantienen más que similitudes, hasta igualdades con otro tipo de préstamos personales del mismo género que ellos, créditos exprés de cantidades bajas a amortizar en pocos días o semanas. Pero no es así, ni mucho menos. Sí es cierto que en lo más superficial los créditos personales Vivus se asemejan a otros productos de este estilo, pero en lo más esencial divergen profundamente.
Similitudes de los créditos personales Vivus con otros productos parecidos
Las semejanzas más destacadas que mantienen los créditos personales Vivus con otro tipo de préstamos personales exprés es que, como su mismo nombre indica, nos los pueden aprobar en un tiempo récord, en cuestión de horas y además podemos realizar todos los trámites online sin tener que realizar desplazamientos ni llamadas.
Otra similitud que guardan los créditos personales Vivus con los demás es que sólo se pueden pedir hasta 800 euros que, por otro lado, con ello los créditos personales Vivus se sitúan entre los más cuantiosos de su género. Pero lo más interesante es sin duda la gran diferencia entre los préstamos Vivus y los demás: los intereses.
La gran diferencia de los créditos personales Vivus
Sabemos que los créditos personales de este tipo son préstamos para sufragar gastos ocasionales, puntuales y/o imprevistos, y que debido a sus altos intereses debemos pensarlo muy bien antes de contratarlos.
Pero lo que sitúa a los créditos personales Vivus a años luz de los demás es precisamente esta cuestión, la de los intereses, porque con los créditos personales Vivus de hasta 300 euros no pagamos intereses, nada de nada, en la primera solicitud.